Sucedio a la salida del colegio La Merced. La principal hipótesis es que los delincuentes tenían la intención de raptarla
Una adolescente salió el lunes del colegio en barrio de Caseros y terminó poco después internada por una fuerte descompensación. Se sospecha de que dos hombres con los que se cruzó en la calle la drogaron con "burundanga" con la intención de raptarla.
La chica de 16 años es alumna del colegio Nuestra Señora de la Merced. Ese día emprendió como siempre el regreso a su casa, pero al llegar al cruce de la avenida San Martín y Doctor José Rebizzo aparecieron los dos sospechosos.
Según el relato que más tarde hizo en la comisaría 1ª de Tres de Febrero, uno de ellos se tropezó a propósito con ella y aprovechó el breve contacto físico para colocarle un sticker en uno de los brazos. Los dos desaparecieron inmediatamente.
Unos pocos minutos después ella sostuvo que empezó a sentirse mal y acompañada por su mamá ingresó de urgencia en la guardia del centro asistencial de la calle Lisandro Medina al 2200. Fue ahí donde los médicos revelaron la presencia en su cuerpo de la sustancia denominada escopolamina, más conocida como burundanga o la droga que anula la voluntad.
En plena investigación y sin descartar ninguna hipótesis todavía, la principal sospecha es que los delincuentes prepararon el terreno con el objetivo de llevarse a la chica cautiva. Hasta el momento, la policía los sigue buscando.
Una adolescente salió el lunes del colegio en barrio de Caseros y terminó poco después internada por una fuerte descompensación. Se sospecha de que dos hombres con los que se cruzó en la calle la drogaron con "burundanga" con la intención de raptarla.
La chica de 16 años es alumna del colegio Nuestra Señora de la Merced. Ese día emprendió como siempre el regreso a su casa, pero al llegar al cruce de la avenida San Martín y Doctor José Rebizzo aparecieron los dos sospechosos.
Según el relato que más tarde hizo en la comisaría 1ª de Tres de Febrero, uno de ellos se tropezó a propósito con ella y aprovechó el breve contacto físico para colocarle un sticker en uno de los brazos. Los dos desaparecieron inmediatamente.
Unos pocos minutos después ella sostuvo que empezó a sentirse mal y acompañada por su mamá ingresó de urgencia en la guardia del centro asistencial de la calle Lisandro Medina al 2200. Fue ahí donde los médicos revelaron la presencia en su cuerpo de la sustancia denominada escopolamina, más conocida como burundanga o la droga que anula la voluntad.
En plena investigación y sin descartar ninguna hipótesis todavía, la principal sospecha es que los delincuentes prepararon el terreno con el objetivo de llevarse a la chica cautiva. Hasta el momento, la policía los sigue buscando.
